La busqueda de los recuerdos 2

Nos preguntósi eramos de allí... y yo no supe que decir asique contesté con otra pregunta... si conocian a mis abuelos. Ellos no me sonaban pero yo de pequeño jamás presté atención a las caras los vecinos... y en efecto si conocian a doña juana y don Antonio. Les expliqué que yo era su nieto y ellos no lo dudaron en ningún momento.Sin darles pie a ello, comenzaron a contarme que los nuevos dueños de la casa nunca llegaron a pasar por allí; que los jovenes de la urbanización se habían estado colando desde entonces y armando jaleo, que por dentro estaba destrozada ... y la mujer ademas insistía constantemente en que estaba llena de ratas y culebras. Les planteí si habia algun sitio por donde pudiera colarme para echar un vistazo pero me desconsejaron esa opción. Por lo visto en las últimas semanas había habido robos en la urbanización y si algún otro vecino me veia era probable que tuviese problemas con la policía. Eso y que la mujer seguia insistiendo en las ratas y las culebras... Mi novia me miraba desde el coche con su cara de ''es una locura, ni se te ocurra''... Y los vecinos imitaban el gesto. Finalmente cedí bajo sus miradas y me limité a hacer algunas fotos con la cámara de mi novia por el poco hueco entre las plantas. Nos despedimos de los vecinos y seguimos nuestro camino hacia el rio...